Jimmy Chance es un veinteañero fracasado. De clase social baja, trabaja limpiando piscinas en la pequeña empresa de su padre. Sus habilidades sociales dejan bastante que desear y no tiene muy claro su objetivo en la vida. Hasta que una noche, por una serie de casualidades, conoce a una chica con la que tiene una noche de pasión en la parte trasera de su furgoneta. Desgraciadamente, a la mañana siguiente su nueva amiga es reconocida como una asesina en serie y termina en el corredor de la muerte... embarazada de Jimmy. Unos meses más tarde, es ejecutada dejando a Jimmy a cargo de su bebé de seis meses, una niña llamada Princesa Beyoncé. Jimmy se encontrará de pronto con un bebé del que cuidar y ninguna idea de cómo hacerlo. Por si fuera poco, el extraño ambiente familiar tampoco va a ayudarle mucho.
Los padres de Jimmy, Burt y Virginia. Le tuvieron a los quince años y ya cometieron en su día todos los errores posibles de los padres adolescentes. Maw Maw es la abuela de Virginia, vive con ellos (o mejor dicho, les deja vivir con ella) y tiene demencia senil. Suele olvidar quién es, recordar sólo cosas del pasado y pasear por el vecindario sin camisa. Mike es el primo fiestero e irresponsable de Jimmy, va y viene como bala perdida. Sabrina es la chica del supermercado, se entretiene pintando caras en la fruta y poniendo los botes de tomate del revés. Con todo, parece una chica bastante normal y Jimmy se enamora de ella en cuanto la conoce.
Con todos estos decadentes y entrañables personajes se criará la pequeña Hope (una de las primeras decisiones acertadas de Jimmy es cambiarle el nombre a la niña). Y con ellos iremos avanzando capítulo a capítulo entre carcajadas y situaciones imposibles. Con mucho humor negro y políticamente incorrecto, provocando al espectador en cada escena para llevarle hasta el final de episodio donde nos aguarda siempre una pequeña moraleja de las que llegan al corazón y nos recuerdan las cosas importantes de la vida.
Raising Hope es ante todo una comedia de situación, que nos hará reír con cada nueva ocurrencia de sus protagonistas y nos asombrará con sus brillantes diálogos. La mano del creador de Me llamo Earl, Greg García, se nota en la ambientación y en los puntos de moraleja sobre la felicidad que nos ofrece la serie. Pero Raising Hope es original en todo lo demás y, sin duda alguna, un soplo de aire fresco en el mundo de las sitcoms.
Totalmente recomendada. En cuanto conozcas a Hope y su extravagante familia no podrás separarte de ellos. Además, son un claro ejemplo de que incluso en los ambientes más deprimentes siempre se puede criar una nueva esperanza y otra oportunidad (nótese que Hope Chance se traduce como Esperanza Oportunidad).
La serie se emite en la cadena Fox. Consta de una temporada de 22 capítulos, de unos 20 minutos de duración. La segunda temporada se está emitiendo actualmente en EEUU y se espera que pronto esté disponible también en español.
Ay me encanta esta serie!! es buenísima y la niña es tan encantadora que me tiene conquistada totalmente, aunque sin duda el mejor personaje es la abuela, es buenísima
ResponderEliminarbesos
Me gusta mucho esta serie. He visto la primera temporada y estoy a la espera de que doblen la segunda.
ResponderEliminarMe encanta esta serie. La de burradas y situaciones disparatadas que llegan a ocurrir. Pero como bien dices, al final (salga bien o mal la cosa) siempre hay una bonita moraleja al estilo Greg García.
ResponderEliminarImprescindible para seriéfilos y amantes de las sitcoms en general.
Jajaja Princesa Beyonce jaja Estos americanos son la leche! Muacks!
ResponderEliminarEs la primera vez que la veo, a ver si la encuentro para verla :D
ResponderEliminarPues tiene pinta de ser la típica tontería con la que me lo paso pipa. Me apunto el título para ver si la consigo.
ResponderEliminarBesos
Pues no la conocía, igual le doy una oportunidad, un beso!!
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